¿Qué llevo conmigo al texto bíblico?

¿Has pensado alguna vez si nosotros llevamos ideas e influencias preconcebidas al texto bíblico que vamos a estudiar? Pues el capítulo 5 del libro de Hermenéutica de Duvall y Hays trata este tema, y SÍ, llevamos muchísimas influencias e ideas preconcebidas.

Reconozco que a mi me pasa, muchas veces deseo que partes de mi carácter o mi manera de pensar estén en un texto o personaje bíblico, y me atrevo a añadir que hago hincapié o mayor énfasis en la parte del texto con la que más me identifico y no con la parte del texto que el autor original quiso darle, ¿te pasa a ti esto? ¿lo notas en predicaciones o predicadores?

Los autores denominan comprensión previa a aquellas nociones y pensamientos preconcebidos que llevamos al texto y que hemos formulado consciente e inconscientemente antes de estudiarlo con detalle (incluye experiencias específicas y encuentros anteriores con el texto). ¿De dónde obtenemos esta comprensión previa? Pues de lo escuchado en la Escuela Dominical, en la Iglesia, en la lectura personal, los himnos, toda la clase de música, arte, literatura cristiana o secular...

¿Es buena o mala la comprensión previa? En principio no es mala siempre que esté sometida a la enseñanza obtenida del texto bíblico. Aún así, he aprendido que debo ir a estudiar un pasaje de la Biblia como una "tabula rasa", dejando que el texto sea el que me hable, me enseñe el significado, y a partir de aquí, tendré una medida fiable para poder conocer si mi comprensión previa es acertada o no.

¿Por qué no fiarme al 100% de mi comprensión previa al estudiar la Biblia? Porque corro el riesgo de creer estar siempre en lo cierto (orgullo),  de adoctrinar el texto en vez de comprenderlo, y el peligro de la familiaridad (como ya lo conocemos, o eso creemos, "pasamos" este texto por alto sin estudiarlo cuidadosamente y seguiremos conociendo lo que ya conocíamos de la Biblia).

Uno de los aspectos que más proporciona "conocimientos" a nuestra comprensión previa es la cultura, y de manera más específica nuestro bagaje cultural . Ésto nos lleva en muchas ocasiones o forzar un texto para que encaje en nuestro mundo actual. Ojo, "no puedo poner mi cultura (trasfondo familiar, trasfondo nacional...) por encima de la Biblia, ni leer las Escrituras con las lentillas de la civilización". 

EL MENSAJE BÍBLICO PROCEDE DE DIOS Y ESTÁ POR ENCIMA DE CUALQUIER CULTURA.

¡Que difícil estudiar la Biblia dejando que ésta sea la máxima autoridad! No quiero ser un demagogo o manipulador, quiero ser una persona estudia la Biblia para enseñar y enfatizar lo que la Biblia enseña y enfatiza. Como siempre, estaría encantado de leer vuestras opiniones, comentarios o lo que creáis conveniente tras leer la entrada de hoy.

Aprovecho para dar las gracias a Mónica Alejandro que me ha conseguido la Bíblia de las Américas en una sola columna, GRACIAS.



4 comentarios:

  1. Me gusta mucho tu blog Isra!! Ánimo con las entradas.
    Un abrazo!

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  2. De nada Israel,me alegro de haberla podido conseguir. Muchas gracias por el blog....me está gustando!
    Un abrazo

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  3. Isra, jaja. YA me has hecho el resumen del capítulo para esta semana de Berea, jajajaja gracias guapo. Que no se entere Gus.

    En serio, un gustazo leerte; algo está "tramando" o tejiendo Dios al estar provocando un mismo sentir entre gente tan variada.

    Besos

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  4. Ya me entere Juan-Pa! =)

    Muy bueno Isra!!

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Mientras sean constructivos adelante...